Obama se inclina ante los extremistas de izquierda y retrasa el oleoducto Keystone.
La falta de acción del DNC habla más fuerte que las palabras
¿Qué logró Hillary en el Departamento de Estado?¿Algo?
Nada es demasiado antiético para Harry Reid.
Es el momento de despedir a Reid
El mercado de seguros médicos de ObamaCare en Oregon tuvo una falla, desperdiciando más de $200 millones
Obama se inclina ante los extremistas de izquierda y retrasa el oleoducto Keystone
El viernes, el gobierno de Obama de nuevo retrasó tomar una decisión sobre el oleoducto Keystone XL. Los principales donantes de izquierda como Tom Steyer, que recientemente se comprometió a apoyar a los demócratas en este ciclo quien se opone al oleoducto, a pesar de que podría proporcionar energía asequible y miles de puestos de trabajo. Los periodistas y los consejos editoriales criticaron la decisión, mencionando, como lo hizo John Harwood de CNBC, que la demora es “100 por ciento política”. Los sindicatos están indignados de que el presidente está bloqueando una oportunidad para crear puestos de trabajo.
El presidente Obama no se preocupa por la creación de empleos. Él se preocupa por complacer a los ecologistas radicales de la izquierda que financian su partido y conforman su base. No queda ninguna excusa para retrasar Keystone: crear puestos de trabajo; proporcionar una fuente de energía confiable; es seguro. Los sindicatos tienen razón de estar molestos de que el presidente de forma egoísta le niegue buenos empleos a la gente. En cambio, está haciendo un favor al mega donante de izquierda Tom Steyer cuyas políticas liberales harán que la energía sea más cara y la vida sea más difícil para los estadounidenses promedio.
La falta de acción del DNC habla más fuerte que las palabras
La semana pasada, la campaña del gobernador demócrata Pat Quinn de Illinois, el estado natal del presidente Obama, usó a Twitter para promover un artículo que llamaba a los republicanos negros traidores raciales y el equivalente a nazis judíos. El DNC no dijo nada, ni su presidente, Debbie Wasserman Schultz, una líder judía prominente. Ella también se quedó en silencio cuando una colega democráta de Broward County, la ex líder de la minoría del Senado estatal Nan Rich, pidió a los demócratas de Broward que apoyaran su llamado a un debate con Charlie Crist, quien también es candidato a la nominación demócrata para gobernador. Wasserman Schultz no apoyó la candidata.
Tal como escribió el director de comunicaciones Sean Spicer, en una nota de esta semana, las acciones hablan más fuerte que las palabras. O en el caso del DNC, la falta de acción habla más fuerte que mil palabras. El DNC se esfuerza mucho para criticar y sermonear a otros acerca de la forma en que deben comportarse en temas de racismo y sexismo. Dan una buena charla, excepto cuando se trata de criticar a uno de los suyos. Si un demócrata margina a las mujeres o las minorías, muestran cero preocupación.
¿Qué logró Hillary en el Departamento de Estado?
¿Algo?
Antes del lanzamiento de su libro, la gente sigue examinando los logros de Hillary Clinton en su larga permanencia en el Departamento de Estado. Nadie parece apuntar a un solo logro. El portavoz del Departamento de Estado Jen Psaki no pudo hacerlo cuando se le preguntó a principios de esta semana. Al día siguiente, la llamada lista de “logros” para la iniciativa Clinton elaborada por Psaki incluía la reorganización de un departamento. Innumerables periodistas y expertos de medios no pueden nombrar un logro. Incluso sus propios partidarios están rascándose la cabeza. Por el contrario, la mayoría de la gente puede recordar Benghazi y la fallido “reajuste de Rusia.”
Esto va a ser un gran problema para Hillary Clinton. Ni siquiera sus más ardientes partidarios pueden decir con certeza que ella logró algo significativo en sus cuatro años como jefe de la diplomacia de Estados Unidos. Su récord en el Departamento de Estado está definido por las iniciativas fallidas y la mala gestión. Lejos de ser un activo, su récord puso en tela de juicio sus credenciales en política exterior y habilidades de liderazgo.
Nada es demasiado antiético para Harry Reid.
Es el momento de despedir a Reid
Harry Reid está teniendo un mal mes. Fue descubierto canalizando dinero de la campaña a sus familiares. (Informes de FEC revelaron que Harry Reid canalizó $31,000 a la empresa de joyería de su nieta por lo cual un portavoz afirmó eran regalos de “joyas” y “baratijas”.) Su Comité de acción política (PAC) de la mayoría en el Senado fue atrapado mintiendo a los votantes. (Glenn Kessler, de The Washington Post llama “los cuatro Pinochos” a los anuncios que el PAC está publicando.) Y lo descubrieron aceptando hipócritamente dinero ligado con la gente que él llama “anti-estadounidense”. (Harry Reid desperdicia su tiempo en el Senado atacando a Koch Industries , pero la propia campaña de Harry Reid ha aceptado previamente las donaciones de un grupo de cabildeo de Koch Industry.
Tal como como escribió en una nota esta semana la vocera del RNC Kirsten Kukowski, no hay duda de que Harry Reid está abusando de su poder como líder de la mayoría y recurriendo a medidas desesperadas y engañosas para aferrarse a su posición. Y al hacerlo, está mostrando que no es apto para ocupar el cargo. Desde ObamaCare hasta la economía, los estadounidenses tienen un montón de razones para votar para que los senadores demócratas salgan del Congreso este mes de noviembre, pero el abuso de Harry Reid de su oficina les da otra: la de despedir a Harry Reid de su posición como líder de la mayoría.
El mercado de seguros médicos de ObamaCare en Oregon tuvo una falla, desperdiciando más de $200 millones
Después de desperdiciar más de $200 millones en el mercado de seguros médicos de su estado, el gobernador Kitzhaber y Cover Oregon del Senador Merkley pronto se “actualizarán” a healthcare.gov. El mercado de seguros médicos estatal que falló tiene tantos problemas que los funcionarios del Estado se están dando por vencidos y están dispuestos a enviar a los residentes de Oregon al mercado de seguros médicos federal, que ha estado plagado de sus propios problemas.
¿Qué tan malo tiene que ser el mercado de seguros médicos de un estado para que healthcare.gov parezca una mejor opción? Cover Oregon es el ejemplo de lo que está mal con los mercados estatales de seguros médicos de ObamaCare. Y es otro recordatorio de que ObamaCare está desperdiciando el dinero de los contribuyentes, negando a las personas el acceso a los planes y a los médicos que les gusta, y al ser incapaz de que los estadounidenses no asegurados accedan a una cobertura médica asequible. Este será un problema en las elecciones de Senado en Oregon.